Muchos piensan que una limpieza a fondo es suficiente para garantizar excelentes resultados en el tratamiento de superficies, pero todo el proceso de acabado exige un pretratamiento adecuado para certificar verdaderos resultados.


El propósito de usar este proceso, es brindar una mayor protección al metal que se está utilizando, reducir su susceptibilidad a la oxidación, la corrosión y los daños, para de esta forma, aumentar su vida útil y su rango de uso. A continuación, citamos algunas características importantes para lograr un excelente resultado:


¿Por qué es necesario?

Este tratamiento es fundamental para todo tipo de láminas metálicas que van a ser pintadas, también a láminas que necesiten ser protegidas con cualquier tipo de recubrimiento para evitar su deterioro, con el fin de darle un medio de anclaje a esta protección. Aunque estas láminas ya vienen con aceites y grasas para evitar que se oxiden, es necesario que sean removidas para brindarle un medio de anclaje al recubrimiento decorativo o protector, esto mediante un proceso de desengrase y fosfatación que puede ser aplicado por inmersión, aspersión o manualmente.


¿En qué consiste este proceso?

Dependiendo de las características de las láminas se realiza un proceso que puede ser en diferentes etapas, dependiendo de la necesidad del cliente y la calidad de la protección. Este proceso consta de una etapa de desengrase, en donde se remueve la grasa y la suciedad. Luego se hace un enjuague con agua para posteriormente aplicar el tratamiento escogido, el cual puede ser: fosfato de hierro, fosfato de zinc, calcio, manganeso níquel, nanorecubrimientos o fosfatación orgánica en una sola etapa. Todo de acuerdo a la resistencia que sea requerida, para luego realizar un enjuague de sellado de la lámina que garantice que la lámina queda en perfectas condiciones.

¿Dónde se aplica este tratamiento?

Las aplicaciones de estos tratamientos se hacen de acuerdo a la necesidad y al tipo de planta que se tenga, se utiliza mucho en la fabricación de muebles metálicos, electrodomésticos, auto partes y todo lo relacionado con aplicación de pinturas en superficies metálicas. Estos tratamientos pueden ser aplicados también en otros tipos de láminas que no son de hierro, tales como galvanizado,  aluminio, zinc y latón.

Omitir el proceso adecuado provocaría un acabado de mala calidad, lo que causaría que el tiempo de vida útil de la pieza se reduzca, incrementando los costos de reproceso.  Por lo tanto, siempre es importante pasar por un pretratamiento correcto.

Para este fin, Khemra Technologies SAS provee el recubrimiento adecuado según sus necesidades. Nuestro equipo de expertos está dispuesto a asesorarlo. Cualquier inquietud, por favor consúltenos a  krt@khemra.com

Autor: Gerente General Khemra Technologies SAS.

Editado por: Comunicaciones Khemra Technologies SAS.

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